Ganó Boca en el partido de ida de semifinales de Copa Libertadores por 2 a 0 a Palmeiras en una gran noche de «Pipa» Benedetto, quien ingresó y en 5m dejó a Boca con una importante diferencia de cara a la revancha.
Benedetto ingresó y a los pocos minutos abrió la cuenta con un cabezazo y luego aumentó con una magistral pisada y un preciso remate al rincón del 1. La revancha, el próximo miércoles en Brasil.
Por Mateo Mastroianni.- Con dos golazos de Darío “Pipa” Benedetto, el Xeneize le ganó 2-0 a Palmeiras sobre el final del encuentro, en el estadio Alberto J. Armando, por la ida de la semifinal de la Copa Libertadores de América. El partido de vuelta, será el próximo miércoles 31 de octubre en el estadio Allianz Parque, con una multitud de hinchas de ambos equipos.
El conjunto dirigido por Guillermo Barros Schelotto, dio un pase fundamental en la búsqueda de llegar nuevamente a una final continental después de 11 años. En una Bombonera a reventar, la contienda no ofreció demasiados signos de ser algo entretenido, incluso, por momentos se tornó algo aburrido y previsible.
El peso de las figuras del local, fueron la principal característica y cualidad para llegar a lograr el objetivo de acceder de fase. La primera parte comenzó con un juego demasiado áspero, cortado y por sobre todas las cosas sin ritmo. De a poco, ambos se fueron diluyendo en el campo de juego en cuanto a intensidad y presión.
Las intenciones de Boca pasaron por intentar jugar en campo contrario, sin embargo, Felipe Melo se encargó de contrarrestar todos los ataques cada vez que le tocó hacerlo, siendo el más regular del Verdao en la mitad de la cancha. Por dicho motivo, los defensores Carlos Izquierdoz y Lisandro Magallán, se veían constantemente obligados al pelotazo frontal para Ramón Ábila, quien se las tenía que arreglar en todas las jugadas solo.
La acción más riesgosa iba a llegar recién a los 15’, cuando tras un centro desde la izquierda de Cristián Pavón, Izquierdoz anticipó y le ganó con un cabezazo al arquero Weverton y el balón se fue apenas desviado. Después de esa jugada, los brasileros esperaron más agazapados y a utilizar a Dudu como herramienta de ataque por las bandas.
Ya en el complemento, por el impulso de tener el apoyo de la gente el Xeneize acorralaba a la visita por todos lados, pero nuevamente todos caían en los problemas de precisión en los pases, de la velocidad y era evidente que se necesitaba una acción individual para que rompiera la sólida línea defensiva.
Fue esa la lectura que estaban haciendo los Mellizos: el colombiano Sebastián Villa ingresó en lugar de Mauro Zarate para darle frescura a los contraataques y ayudar a sus compañeros a ser más punzantes para lastimar al rival. Ya con el cafetero en cancha, se vio una leve mejoría pero se notaba que la dificultad pasaba por el armado táctico.
Con el correr de los minutos, el 0-0 se pronunciaba como el resultado final. Es ahí cuando Barros Schelotto recurre una vez más al banco de suplentes y lo manda adentro a Benedetto. La modificación sonaba demasiado rara, casi inexplicable, teniendo en cuenta que la idea de Boca durante 80’ fue tirarle ladrillazos a Wanchope Ábila para que dicho jugado pivoteara y descargue con sus acompañantes en la jugada, un planteamiento que por supuesto nunca dio frutos.
Pero el fútbol tiene ese semblante que lo hace tan hermoso y apasionante, y es que todo puede pasar. Un tiro libre a 30 mts del arco, Lucas Olaza remató fuerte al ángulo y el arquero del Palmeiras voló rápidamente para mandarla al tiro de esquina, posteriormente quedando en el suelo tras chocar su espalda contra el palo.
Justamente de ese córner, Villa metió un centro bombeadísimo al corazón del área para que aparezca en soledad el “Pipa” y meter un certero cabezazo cruzado y darle la victoria a su equipo en un partido que tenía todos los caminos cerrados. El desahogo de los simpatizantes en el estadio fue extremadamente holgado, el goleador que hacía más de 300 días que no convertía, justo reapareció en un duelo de eliminación directa.
Como si fuera poco, cinco minutos después, Benedetto marcaría otro más para su cuenta personal y para darle a Boca el triunfo final. Una jugada comenzada por Pablo Pérez, este descargó para el delantero que hace un giro total dejando en ridículo a su marcador, poniendo la pelota con un latigazo descomunal al lado del palo derecho de Weverton, para que definitivamente la cancha sea una fiesta y un delirio completo.
El plantel de Luiz Felipe Scolari, llegaba a este cruce copero en un gran momento anímico y futbolístico, siendo puntero del Brasileirao con cuatro puntos de ventaja sobre su escolta Flamengo y con nueve encuentros sin conocer la derrota. Ahora, toda esta historia se definirá en Brasil, en el Allianz Parque el próximo miércoles desde las 21.45 por la pantalla de Fox Sports.
Foto: Marca